miércoles, 30 de marzo de 2011

DE NUEVO SOBRE LOS SUPERMERCADOS. ESTA VEZ LOS RESULTADOS SON MÁS ALENTADORES

Ayer mismo publiqué en el blog una noticia sobre la explotación a que son sometidos los empaquetadores en los supermercados por las compañías empleadoras, que incluso ellos deben pagar por trabajar y ganar una miseria salarial. Pero ahora traigo dos noticias que nos dan un poco más de luz sobre la violencia laboral que se comete en estos centros y que no es exclusiva de Chile, porque los supermercados de compañías transnacionales actúan así en todos los países del continente, impiden la sindicalización, la negociación colectiva, la defensa de los intereses de los trabajadores. Lean y comprueben.

Por primera vez justicia porteña falla a favor de empaquetadores de supermercados.
Una histórica sentencia emitió el Juzgado del trabajo de Valparaíso: estableció la relación laboral entre los jóvenes que empacan la mercadería en un supermercado y la empresa que coordina sus turnos, obligándola a pagar una millonaria indemnización.

“Atentar contra el sistema” fue la razón que esgrimió Cristian Orrego Nercasseau, encargado de empaquetadores en el supermercado Jumbo de Valparaíso, al momento de despedir a Óscar Ilabaca Mancilla, uno de los tantos jóvenes que empacaban mercadería en el local porteño. Este estudiante de turismo llevaba cuatro años y ocho meses trabajando en el lugar, donde además debía cancelar alrededor de 300 pesos para poder optar a un turno. Ilabaca, junto a otros dos compañeros de trabajo también despedidos, se animaron a presentar una queja en la Inspección del Trabajo contra Soeus, empresa que coordina los turnos de los empaquetadores en el Jumbo porteño y en otras firmas de retail. Acusadores y acusados fueron citados para dirimir el entrevero laboral a mediados de octubre pasado. Los representantes de Soeus no se presentaron. Los jóvenes no tardaron en demandarlos en el Juzgado de Letras del Trabajo de Valparaíso.

La audiencia duró más de dos horas. La magistrado Ximena Cárcamo del tribunal porteño escuchó a los testigos de Soeus y después oyó las pruebas orales y documentales -entre ellas un reglamento interno- presentadas por Óscar Ilabaca quien reclamaba despido injustificado y salarios impagos. La jueza, finalmente, resolvió que la empresa Soeus debía pagar diversas indemnizaciones que ascendían a cerca de 1.800.000 pesos, estableciendo que el despido fue injustificado.

Santa Isabel “te conoce” pero más conoce como no respetar a sus trabajadores
Este es un país con características extrañas. Las cosas de importancia que suceden, sólo lo son si aparecen en televisión. Por eso todos rasgan vestiduras ahora, con la denuncia efectuada en un programa de TVN, sobre las prácticas de Supermercados Santa Isabel en Concepción, que obligaba a trabajar a sus empleados del turno de la noche, encerrados con llave, sin posibilidades de escape ante una emergencia, situación que ya había quedado al descubierto con el terremoto de Febrero pasado, cuando sólo pudieron salir, cuando llegaron los saqueadores. Ante eso, es inaceptable la cara de sorpresa del Seremi de la Octava Región, ante las pruebas presentadas, cuando opinó que debía “entonces investigarse si había algo irregular”.

Las prácticas abusivas de las grandes empresas son conocidas y toleradas por el Gobierno, lo que conlleva una permanente violación de los derechos de sus trabajadores y una tolerancia que sólo se altera cuando se produce una tragedia y aparecen las declaraciones rimbombantes. Es necesario preguntarse cual es el rol de todas las entidades fiscalizadoras del Gobierno y hasta cuando, como lo expresó María Cecilia Sánchez Toro Directora Nacional del Trabajo, siguen en “reorganización”, como lo viene repitiendo desde Marzo del año pasado.

De la primera declaración emitida anoche mismo por Cencosud-Santa Isabel en que dijo cumplir con toda la normativa, cambió esta mañana a decir “que ya está trabajando para corregir errores”. Es sorprendente que Evelyn Matthei, Ministra del Trabajo, expresara que más que las multas, lo que importa es que se cambien los procedimientos, si estas grandes empresas son maestras en eludir las normas y no cumplirlas.

Ya mañana nadie se acordará de esto, como se han olvidado los 50 muertos de la minería ya pasada la euforia del rescate de los 33 mineros. Los abusos seguirán con la complicidad de otros agentes como las Mutuales de Seguridad que no cumplen su rol. Si estas cosas como la denunciada pasan, es porque no funcionan los Comités Paritarios ni están instalados los Departamentos de Seguridad, obligatorio legalmente para las empresas con más de 100 trabajadores. Pero no hay que olvidar que los máximos ejecutivos de las Mutuales son también accionistas de las grandes empresas, así que de inspecciones ni hablar.

Lo del encierro es casi anecdótico, grave pero anecdótico al fin, porque si de verdad se controlara, se encontrarían muchas sorpresas en estos supermercados, como la insalubridad, la manipulación de alimentos contra todas las normas de higiene, niños trabajando sin sueldo, etc. etc. etc. Pero no, de nada de eso se habla y el Ministerio de Salud informa con orgullo, que se cerró un puesto de venta de completos en Pelluhue como ejemplo de su acción fiscalizadora. Ya es hora de abandonar los discursos, terminar con las “reorganizaciones” y actuar seriamente para poner atajo a todos los abusos que se cometen contra los trabajadores.

1 comentario:

  1. estoy buscando departamentos en Recoleta para irme a vivir en unos meses, quería saber como estaban los costos de los supermercados en Buenos Aires, esto me ayuda bastante, espero que no siga subiendo, aunque lo dudo

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