viernes, 21 de octubre de 2011

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Como bien dice el texto, hay vejación, humillación y discriminación, pero también hay un atentado contra la seguridad y salud en el trabajo. Esperemos que la Justicia y el Ministerio del Trabajo no hagan oídos sordos.

Trabajadoras de una empresa en la provincia de Murcia, España, reclaman a la Justicia después de haberse visto obligadas a llevar un solapín en el cuello con la palabra “baño” para poder ir al servicio sanitario. Según la queja dirigida este martes al Ministerio de Trabajo, el reglamento de la fábrica de envases El Ciruelo de la provincia de Murcia, estableció tres reglas para controlar el tiempo de las trabajadoras. Las supervisoras deben impedir el consumo excesivo de líquido durante el trabajo para evitar los viajes frecuentes al servicio sanitario.

Las mujeres tampoco pueden demorar más de 5 minutos en el baño. La tercera regla establece el uso de un solapin colgado al cuello. Según la Federación Agroalimentaria de las centrales sindicales Unión General de Trabajadores y Comisiones Obreras, la denuncia fue presentada por dos trabajadores despedidas por negarse a acatar las normas de uso del baño.

“Semáforo”

Según las denunciantes, el tiempo de permanencia en el baño está controlado por un aparato que registra las impresiones digitales. Las 200 trabajadoras de la fábrica de envases de frutas deben pedirle a la supervisora el solapín cuando desean ir al baño. El aviso colgado al cuello muestra de forma clara y visible la palabra “baño” con el diseño de un semáforo de tránsito.

Según el Secretario General de UGT de Murcia, Antonio Jiménez, la norma de la fábrica constituye “una vergüenza, una violación de los derechos de los trabajadores y una humillación enorme para las trabajadoras”. La medida solamente se aplica para las mujeres. En una nota de prensa, el sindicato dice que “no va a consentir tal vejación y actuación discriminatoria y va a elevar el caso hasta las últimas consecuencias”.

Las mujeres disponen de media hora de descanso no remunerado y a veces el trabajo dura hasta 12 horas diarias. Ellas relatan que también sufren amenaza de descuentos en el pago si se demoran más de cinco minutos en el baño.

La denuncia está siendo investigada por inspectores del Ministerio de Trabajo.

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