¿DONDE ESTÁN MIS SEGUIDORES?

He podido comprobar con cierta tristeza que hace mucho tiempo no me dan comentarios al blog, aunque ha crecido la cantidad de accesos, pero siempre nos ayudan mucho los comentarios y sobre todo saber que tenemos un blog "humanizado", vivo, comentado, que provoca deseos de opinar.
Como verán he ido colgando artículos de interés, he comentado yo misma algunos de ellos y he colocado experiencias y trabajos propios. Hay muchos temas que merecen ser atendidos, que por falta de tiempo no podemos abordar y que podrían ser objeto de análisis si hubiese un intercambio entre todos y todas para llegar al consenso de aquellos asuntos que más provocan interés.
Yo soy muy proclive a tratar los temas que se refieren intímamente a la persona humana, los que tienen que ver con el derecho en su relación con la sociología, la psicología, la economía, no derecho puro, por derecho, sino derecho vivo, humanizado también, que tenga en cuenta la vida en sociedad como parte importante de la normatividad jurídica.
Todos sabemos que si un fenómeno no atañe a muchos, si no es de reconocimiento social, no tendrá relevancia como para ser incorporado a una norma legal. Por eso siempre tratamos de investigar, introducirnos en la práctica de los países para entender por qué no llega a la opinión pública siendo tan necesaria una norma protectora para las relaciones que se establecen. Me refiero por ejemplo, a todo lo relativo a la violencia laboral, tanto física como psicológica, en sus variables de hostigamiento, persecución, maltratos, amenazas, hasta llegar a las más perversas conductas de acoso moral y sexual que minan las defensas de quien las padece y ha sido victimizado. Pero siempre he abogado porque las denuncias y demandas se traten en sede laboral e incluso constitucional, no andar por las herramientas del derecho penal, porque no hace falta criminalizar una relación juridica que tiene sus sujetos, objeto propio y que puede resolver sus conflictos a partir de sus propias normas.
Hoy es viernes, se termina la semana laboral, les deseo un buen fin de semana y el lunes entraré con nueva información para todos y todas y espero que mi grito de auxilio, mi llamado de interacción, surta efectos en mis lectores y lectoras.
Hasta el lunes.