Interesa reflejar en este espacio las diferencias de tratamiento por la catástrofe invernal en Venezuela y Colombia. De Venezuela ya han podido comprobar con creces en la prensa y en la TV la ayuda humanitaria recibida, sobre todo, de los países del ALBA. Cada uno ha dado lo que tiene, cómo ha podido, se ha distribuido y se ha paliado en algo las necesidades de aquellos que lo perdieron todo. Ahora un colega del Polo Democrático Alternativo de Colombia me envía una información que no reproduzco en toda su magnitud, sino solamente este espacio sobre la situación actual.
Reconstrucción por catástrofe invernal en Colombia.
La catástrofe invernal es tal vez una de las más grandes de nuestra historia. Las cifras oficiales son elocuentes:
310 Muertes
2’220.482 Personas damnificadas
292 Personas heridas
62 Personas desaparecidas por las lluvias
5.600 Viviendas destruidas
325.379 Viviendas averiadas
148.890 Casos de dengue
109.347 Casos de malaria
En medio de la tragedia humanitaria, dicha catástrofe ya está siendo utilizada para avanzar la agenda privatizadora del Gobierno Nacional. En uno de los primeros decretos de la emergencia, el Presidente Santos, con la firma de todos sus ministros, autorizó la venta de un 10% adicional de ECOPETROL. Se aprovecha que la gente está desorientada, ve el tamaño de los costos anunciados por el Presidente Santos: 10 billones de pesos, y todos los nuevos impuestos aparecen insuficientes. La venta del 10% de ECOPETROL agravará a la larga las finanzas públicas y limitará la capacidad del Estado para realizar inversión social, cuando la destinación de las utilidades de ese mismo 10% durante un periodo de 3 a 5 años, daría los mismos recursos sin perder el capital para siempre. Pero eso no entra en sus cálculos. Lo que está en sus agendas es aprovechar la tragedia para avanzar en las privatizaciones y el desmonte del Estado, ahora con la entrega del mayor patrimonio nacional a los inversionistas nacionales y extranjeros.
Para impedir que se siga aprovechando la emergencia en contra de los intereses más caros del pueblo y de los damnificados, la militancia polista debe volcarse a la organización de los damnificados con el objetivo claro de colaborarles en la defensa de sus intereses. De esa manera cumplimos, además, con la orientación del CEN en la Circular No. 08 de 2010 de articularnos con las luchas populares y sociales de nuestro entono.
Nuestra Misión: Organizar a los damnificados por la ola invernal para la defensa de sus intereses.
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