Buenas tardes de lunes día 17 tengan todos mis queridos lectores, amigos y amigas, pues bien, continúo con la situación del envejecimiento poblacional y el aumento de la edad de jubilación, lo cual no es un hecho casi consumado en España, ya en otros países ha tenido lugar por diversos motivos, incluso en Cuba, la edad de jubilación era baja en comparación con otros países, siendo ahora diferenciada entre hombres y mujeres con 5 años a favor de las mujeres, 60 para ellas y 65 para los hombres con 30 años de servicio y una esperanza de vida de 78 años y un envejecimiento poblacional que ya raya con casi un tercio de la población. Es bueno también subrayar que la población cubana se caracteriza por un proceso de envejecimiento, resultado de la baja natalidad y el aumento de la esperanza de vida al nacer, lo que influye en la disminución de los arribantes a la edad laboral y en un creciente impacto en la disponibilidad de los recursos humanos, factor este esencial para satisfacer las necesidades de la sociedad. Sin embargo la nueva Ley No. 105 de Seguridad Social permite un período de tránsito del 2009 al 2015, para no afectar a aquellos que ya estaban casi pegados a la obtención de su jubilación, nacidos los hombres en 1949 ylas mujeres en 1954, hasta llegar los hombres a 1955 y las mujeres a 1960 permitiendo un retraso de 6 meses en cada caso para obtener su jubilación.
Ahora quiero presentarles esta información brindada por Antonio Ojeda Avilés, quien se desempeña como Presidente de la Asociación Española de Salud y Seguridad Social en una Nota aparecida en www.aesss.org el 14 de enero de 2011. También recordar que el artículo de Vicenç Navarro al cual se refiere, lo pueden consultar en mi blog el pasado viernes 14 con el título de EN TODOS LADOS CUECEN HABAS. ¿CIERTO O NO?...
La navaja de Occam no tiene filo.El principio de parsimonia, o de parqueda (“navaja de Occam”), reza que entre dos posibles soluciones a un problema, será más cierta la que sea más simple. Los economistas del FEDEA, los bancos y las aseguradoras vienen hablando del enorme peligro de las pensiones debido al envejecimiento de la población, al problema demográfico. Y puesto que se trata de que la población vive más años, la solución será el demorar la edad de jubilación. Con todos los respetos, es una simplicidad, probablemente interesada: pues si es cierto que la población vive más años que antes (se habla de 1919, cuando empezó el Retiro Obrero), también es cierto que hay factores que debieran analizarse conjuntamente y no se hace:
1º. El dato de la productividad. ¿España en 1919 producía lo mismo que hoy? ¿Un obrero con su azadón de entonces producía lo mismo que un empleado con su ordenador de hoy? El país ha sufrido un cambio en los últimos decenios que no ha conocido ningún país desarrollado. Pero el mero dato demográfico iguala a unos y a otros, de manera primaria.
2º. El dato del envejecimiento. Los indicadores sanitarios dicen que la población es más anciana, pero que la vitalidad permanece en fronteras más clásicas de las que quisiéramos. Vicenç Navarro, catedrático de Políticas Públicas de la Universidad Pompeu Fabra, lo indica con claridad en un artículo aparecido en el diario Público recientemente.
3º. Ahora bien: el país necesita retrasar la edad de jubilación porque de otro modo los mercados financieros lo llevarán a la quiebra por no haber seguido el mismo camino de Alemania y Francia y defendido por la Comisión Europea. El retraso es, pues, una medida necesaria desde el punto de vista político-económico. Otras medidas más adecuadas, como el retraso voluntario o el aumento de la productividad, no serían aceptadas por la opinión internacional.
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